PRECINTOS DE CUATRO COLORES PARA DETECTAR EL TIPO DE JAMÓN.

Con el objetivo declarado de que el consumidor tenga la mejor información posible para saber qué jamón compra, la norma de calidad del ibérico exige la incorporación de una brida, especie de precinto, de distinto color por cada designación que se colocará en cada pieza. Así, un jamón o paleta de bellota de un guarro ibérico puro deberá llevar una de color negro. Si el producto deriva de un porcino que no es cien por cien ibérico, el color será rojo; el verde, para los de cebo de campo y blanco para los jamones procedentes de cerdo exclusivamente de cebo.